MARTÍN-CANO, F. (2008): A pesar de que la zoofilia ha sido desconsiderada.... http://martincano.webcindario.com/zoofilia.htm, http://es.groups.yahoo.com/group/Conocimientos_en_la_Prehistoria/message/502

RESUMEN: A pesar de que la zoofilia (actos sexuales entre humanos y animales), ha sido desconsiderada en culturas occidentales hasta hace poco, sin embargo en muchas otras ha sido una practica natural de ambos generos.

Francisca Martín-Cano Abreu

A pesar de que la zoofilia ha sido desconsiderada....

24/1/08

Hola amigos:

Hay una palabras en el anterior correo de Pernelle que me gustaría comentar (2008): “cada pueblo tiene su riqueza y su identidad, es lo que hace que cada cultura sea importante y por lo tanto necesite ser conservada, porque todo este bagaje es parte de la historia del ser humano. Hasta lo negativo, lo cual mejor me callo pero que en cualquier libro se puede encontrar.”

Como "lo negativo que se calla", sé que se refiere a actos de zoofilia / bestialism (que han sido desconsiderados por la moralidad religiosa, judía, cristiana, e islámica, desde hace unos 2.000 años, pero que tal rechazo no es universal), os copio un comentario, que tengo escrito para mi libro: Sexualidad femenina en diversas culturas. De «ninfómanas» a «decentes».

(No olvidemos que todo es relativo, y que en nuestra sociedad occidental también era malo hacer el amor sin estar casados, sobre todo si eras mujer, pero que se permitía a los varones, a los curas, que además se permitían ser pederastas, homosexuales, mientras llamaban putas ( como si cobraran) a las promiscuas, etc.).

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En la sociedad occidental, durante los últimos 2.000 años, por influjo de creencias judeocristianas, y en el último siglo por influencia del psicoanálisis, la zoofilia ha sido desconsiderada como perversa y sospechosa, propia de seres depravados y solitarios, con problemas de adaptación, o con dificultades de relacionarse sexualmente.

Pero, a pesar de estar vigente en occidente tales creencias, las encuestas de Kinsey, realizadas en 1948 y 1953 con 8.000 varones y 12.000 mujeres, pusieron de manifiesto que las relaciones sexuales con animales, tanto en forma de coitos como con el cunnilingus, han sido practicadas con regularidad por personas normales, según declararon el 3,6% de las mujeres estadounidenses y el 8% de los varones. Y sólo el 17%, pertenecía al ámbito rural (datos aportados por Pilar Cristóbal, 2003).

Es evidente que cincuenta años después, la realidad se ha impuesto y se ha incrementado y normalizado tales prácticas. Dada la mayor libertad individual de las democracias, que permite que en la intimidad cada uno pueda gobernarse a sí mismo, es natural que los individuos puedan satisfacer su deseo de sentir placer con animales, sin estigmas, como satisfacen cualquier otro deseo humano más.

Atentamente, Francisca

Francisca Martín-Cano Abreu

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